La terminal de almacenamiento y manejo de cereal y astillas (“chips”) de madera emplazada en el mismo puerto de Montevideo, concesionada a la empresa uruguaya Obrinel (TGM), está lista para empezar operaciones, tras dieciocho meses de construcción.
El proyecto -el mas grande en su tipo en el país- incluye la provisión de los 12 grandes silos de almacenamiento y sistemas de trasiego de cereal, su montaje y puesta en marcha a cargos de la española “Silos Córdoba”, así como la mecanización y los equipos de carga de buques de ultima generación de una empresa suiza, representadas y promovidas por SERCOBE a través de su delegación en el Rio de la Plata.
La terminal consiste en una planta de silos para almacenaje de granos y chips de madera construida sobre 9 Has. ganadas al mar en la bahía del Puerto de Montevideo, con una capacidad inicial 120.000 toneladas (12 silos),y una capacidad operativa de 2 millones de toneladas anuales , capaz de atender con solvencia, la creciente demanda el mercado local. El proyecto prevé una ampliación para una capacidad final de 200.000 ton con 8 silos adicionales y un próximo enlace con la red ferroviaria existente en las cercanías.
Complementariamente, el puesto de atraque se ha diseñado y dragado con una profundidad de 13 metros, para la carga de buques tipo Panamax y Post-Panamax de 250 mts de eslora y 80.000 tons DWT . Este calado y su localización, convierten al proyecto y al puerto de Montevideo , en una excelente terminal de complemento o estación de “top-off” para barcos cerealeros en la región.
Ambas instalaciones están conectadas por una galería de 300 mts en voladizo sobre las aguas de la bahía, que soporta al sistema de transporte el que a su vez, alimentara al de carga a instalarse en las torres para atender la operación sobre los buques. La velocidad de la misma será de 1200 TM/hora.
De esta forma, el cereal y las astillas de madera llegarán desde los distintos puntos del país directamente a Montevideo y podrán ser cargadas para su transporte marítimo, sin necesidad de transporte fluvial por barcaza. Esta obra de infraestructura –cuya inversión total alcanza los US$ 100 millones de aporte privado- está llamada a convertirse en una referencia tecnológica y logística en la región, y abre el camino para un gran número de inversiones en infraestructura portuaria en los ríos Uruguay y Paraná.